Qué pasa si un coche te pisa el pie

El conductor de un coche no es un piloto de carreras, aunque algunos puedan pensar lo contrario. Y la posición correcta frente al volante no debe ser excesivamente inclinada, ya que los brazos, como en el punto anterior, quedarán estirados en exceso.

Tampoco se recomienda mover el asiento demasiado hacia adelante. En este caso, sus pies pueden quedar atrapados fácilmente en los pedales e impedir el frenado de emergencia. Incluso las rodillas, que estarán demasiado flexionadas, pueden convertirse en un obstáculo para las manos al girar el volante.

Responsabilidad del conductor y del peatón en caso de colisión

En la mayoría de los casos, el conductor es el único responsable, y esto sucede cuando se salta una señal de alto o un semáforo, por ejemplo, o atropella a una persona en un paso de peatones. Pues bien, tal y como prevé el Real Decreto Legislativo 8/2004, de 29 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Responsabilidad Civil y Seguros en la Circulación de Vehículos a Motor en su artículo 9.2:

“Los conductores deberán utilizar el vehículo con la debida diligencia, precaución y no distracción para evitar daños a sí mismos o a otros, teniendo cuidado de no poner en peligro a sí mismos ni a los demás ocupantes del vehículo y a otros usuarios de la vía”.

Disco atascado

En este caso se detecta por la dificultad para desembragar, no se debe forzar el pedal, puede doblar o romper el grupo de presión, la causa más probable es la corrosión en volante o conjunto de presión se produce por agua o aceite en malas condiciones. Se debe llevar al taller, donde se debe quemar con acpm o gasolina, teniendo cuidado de no salpicar el rodamiento.

Lo percibimos cuando se pisa a fondo el pedal, no se puede hacer el cambio o el cambio se hace generando ruido en la caja.

Acumulación de culpa en atropello y fuga

La acumulación de culpa equivale a considerar que el peatón atropellado es en parte responsable del accidente al cruzar en sentido contrario o en un semáforo en rojo pero que el El conductor también es en parte responsable de no conducir a una velocidad más adecuada en la carretera, porque se distrajo con su teléfono móvil o por cualquier otro factor que habrá que probar.

En estos casos, el perjudicado puede reclamar una indemnización por atropello y fuga, cuya cuantía variará entre el 25% y el 100%, según el grado de responsabilidad en el siniestro.